Jim Botón y Lucas el Maquinista – 3

Jim Botón y Lucas el Maquinista – Michael Ende

(Notas personales)

Cap. 3 En el que se está a punto de tomar una decisión muy triste con la que Jim no está conforme.

Jim siguió creciendo y pronto llegó a ser un medio súbdito. No había escuelas en Lummerland por lo que Jim no aprendía a leer, escribir o hacer cuentas. Pero eso no les preocupaba. Eran felices.

El que se preocupaba era el Rey y una noche llamó a Lucas. Dándole vueltas al asunto, finalmente sentenció: Lucas, Jim pronto será un súbdito de este reino, y tal vez necesite una casa pero Lummerland es muy pequeño y tendremos problema de sobrepoblación por lo que tendremos que prescindir de Emma, tu locomotora.

Lucas se fue pensando y llegó a la conclusión de que si Emma se tenía que ir, él también lo haría, así que al llegar a la estación se lo dijo a Emma, quién no entendía (porque las locomotoras no son muy inteligentes) pero sí sentía la tristeza de Lucas (porque las locomotoras tienen una gran sensibilidad).

Jim Botón apareció de pronto. Se había quedado a dormir allí esperando a Lucas y escuchó todo. Preguntó si todo ese asunto era su culpa, y aunque Lucas le dijo que no, Jim sintió que sí lo era, así que propuso que él también partiría con ellos.

¿Pero que será de la señora Quée? Pues estaría triste pero Jim le dejaría un dibujo para explicarle su partida (no una carta porque no sabía escribir). Jim se sentía feliz y desgraciado al mismo tiempo.

Así que acordaron que partirían esa misma noche.

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