De la Tierra a la Luna – 17-18

De la Tierra a la Luna – Julio Verne

(Notas personales)

 

17. Un parte telegráfico.

El 30 de septiembre se recibió un telegrama dirigido a Barbicane.

«Francia, París.
30 septiembre, 4 h. mañana.
Barbicane. Tampa, Florida.
Estados Unidos.

Reemplazad granada esférica por proyectil cilindro cónico. Partiré dentro.

Llegaré por vapor Atlanta.

MICHEL ARDAN»

18. El pasajero del Atlanta

De alguna forma, todo mundo en América se enteró del contenido del telegrama y todo mundo quería saber que sucedería ahora. De inmediato Barbicane reunió a los miembros del Gun Club que se encontraban en Tampa y escuchó sus opiniones. Todos estaban de acuerdo en que era una locura o una broma, excepto Maston, quien lo consideraba una genialidad.

Después, para poder responder a la inquitud de la población en general, era necesario saber si efectivamente ese Michel Ardan venía a Tampa con el propósito de ser enviado a la Luna.

Así que para responder a ello, Barbicane se comunico con Liverpool: “¿Qué buque es el Atlanta? ¿Cuándo salió de Europa? ¿Llevaba a bordo a un francés llamado Michel Ardan?”

2 horas después recibió respuesta: “El vapor Atlanta, de Liverpool, se hizo a la mar el 2 de octubre con rumbo a Tampa, llevando a bordo a un francés que, con el nombre de Michel Ardan, consta en la lista de los pasajeros”.

Habiendo confirmado la existencia del tal Ardan, y que llegaría a Tampa dentro de 15 días, Barbicane ordenó la suspensión temporal del proyectil. El 20 de octubre, desde el puerto se alcanzó a ver una humareda en el mar. A las 6 de la tarde el buque Atlanta fondeaba el puerto de Tampa.

Barbicane subió al buque para buscar a Ardan. Se econtraron. Michel Ardan era un tipo aventurero y bonachón que caia bien a casi todos quienes lo conocian. *se hace una descripción de su físico y su personalidad. Si bien Ardan y Barbicane era sumamente diferentes, en comun tenían el ser emprendedores, atrevidos y audaces.

Cuando Barbicane le preguntó cuál era su plan, Ardan dijo que no le gustaba estar repitiendo las cosas, y dadas las circunstancias, prefería que al día siguiente se hiciera una conferencia pública donde daría a conocer sus planes y respondería preguntas. Barbicane estuvo de acuerdo.

Por su parte, Maston estaba fascinado con la llegada del Ardan, el héroe.

—

<- Anterior

Siguiente ->

< Índice >