Avanzando
Empecé a escribir esta serie de «Pienso, luego escribo» el 31 de agosto. La idea era hacer una publicación diara.
Hubo días que no escribí, pero no dejé de lado la intención y desde el 5 de septiembre, he cumplido.
31 de agosto – https://soyjosefo.com/apuntes/pienso-luego-escribo/
2 de septiembre – https://soyjosefo.com/apuntes/un-dia-si-un-dia-no/
5 de septiembre – https://soyjosefo.com/apuntes/no-se-puede-borrar/
Pensar y escribir, o si el segundo verbo lo hacemos más genérico, Pensar y hacer, es uno de los mejores hábitos que conozco. Sin embargo, no de los más comunes.
Con mucha frecuencia escucho a otras personas – y también a mí mismo – decir lo que pensamos sobre tantas cosas: pensamos que estaríamos mejor si ahorramos, si hacemos ejercicio, si pagáramos nuestras deudas, si expresáramos nuestros sentimientos, etc.
Pero lo más común, tristemente, es que no lo hacemos.
O, siendo más puntual, no lo hacemos con las cosas que decimos que nos harían bien en nuestras vidas cotidianas, pero sí lo hacemos con aquéllas que no nos aportan o que incluso nos complican la existencia: hacemos el hábito de llegar tarde, de posponer la ida al gimnasio, o de evitar hablar de temas importantes con las personas que son valiosas en nuestra vida.
No estaba seguro que fuera a ser constante en este ejercicio de «pensar y escribir». Si no lo hubiera sido, en algún momento lo hubiera retomado. Pero sí lo estoy siendo, así que lo seguiré haciendo pues además de sentirme bien por cumplir con lo que me propuse, a través de leerme a mí mismo, me voy conociendo un poco más.